Este sábado 8 y domingo 9, el Gran Teatro de los correntinos será sede estelar del BAFICI Itinerante, la magnífica muestra de cine independiente más novedosa de los últimos años en el país. Tendrá una serie de obras fílmicas que se presentarán por primera vez en el interior nacional: Pablo Levy presentará “Masterplan” y además se proyectarán “Criatura de la noche: Vampiro”, “La araña vampiro” y “El último Elvis”, todos ellos filmes que fueron parte del último Festival 2012 organizado por el Ministerio de Cultura porteño. Las funciones serán con entrada gratuita y de acceso libre al público en San Juan 637, desde las 20.
El BAFICI Itinerante tiene lugar en distintas ciudades del país en colaboración con instituciones locales, con el fin de expandir la oferta del Festival y generar espacios alternativos de exhibición de obras cinematográficas que no llegan habitualmente a las carteleras comerciales ni al interior de nuestro país. El Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI) es un evento cultural que contribuyó a mejorar y a transformar los modos de ver y de hacer cine en Argentina. La diversidad y el riesgo estético de su programación y la posibilidad que ofrece de aproximar espectadores, críticos y cineastas a las nuevas tendencias del cine del presente y del futuro fueron así haciendo crecer su relevancia en todo el mundo cinematográfico.
A la siguiente programación se sumarán directores y productores argentinos que visitarán las distintas sedes provinciales para realizar encuentros e intercambios con el público asistente. Y en relación a la apertura de este evento prevista para este sábado, a las 20, es posible señalar que estarán presentes autoridades provinciales, entre ellas, el vicegobernador Pedro Braillard Poccard.
Es válido indicar además que se trata de una presentación del Gobierno de la ciudad Autónoma de Buenos Aires en Corrientes.
Estrenos para este domingo
“El último Elvis”/ 20 hs
Carlos Gutiérrez es el último Elvis. No sólo porque es el Elvis del cono sur. Es también el último Elvis, el del final, alejado de su plenitud física, excedido de peso, sudoroso, malhumorado. Pero también apasionado y con absoluto manejo de su histrionismo. Carlos trabaja en una fábrica, y también trabaja de imitador de Elvis en casamientos y otros eventos. Pero Carlos no es el obrero, ni siquiera es Carlos: es Elvis. Come lo que comía Elvis, en su televisión no hay otra opción que conciertos del Rey, vive la admiración y la personificación como obsesión inquebrantable. Carlos también es un padre separado, y tiene una hija llamada, por supuesto, Lisa Marie. Carlos tiene planes. Y también está la realidad. La ópera prima de Armando Bo presenta un personaje y un actor inolvidables, y una remarcable seguridad narrativa que se anima a la emoción profunda y no por eso menos pudorosa. No hay muchas películas como El último Elvis, en las que un debutante se anime con semejante aplomo a tantos temas cruciales.
“La araña vampiro”, 22 Hs.
Un joven con su padre. Un viaje a un lugar aislado para buscar tranquilidad porque el joven tiene ataques de pánico. Una cabaña y un aislamiento (y un actor, Alejandro Awada) que remiten a El aura de Fabián Bielinsky. También la falta de adaptación del joven urbano al lugar “salvaje”. Para peor, y para detonar el viaje dentro del viaje, aparece una araña grande y amenazante. El título del film adelanta que esta araña no es cualquier araña. Y el film de Medina, como ocurría con Los paranoicos, no es cualquier film en el contexto del cine argentino. Medina es un narrador convencido y consumado. Y coherente. Cambia de espacio, pero su héroe permanece. Es, al menos hasta este segundo film, uno clásico, de esos que deben probar su valía, sobreponerse a circunstancias que los superan. Así, el joven de los ataques de pánico deberá luchar contra los efectos de la araña, en un viaje por la montaña con un baqueano en el que tendrá que confiar porque no le queda otra alternativa. Viaje, buddy movie, ciencia ficción, coming of age, aventura. A Medina le gustan los géneros. Bienvenido, otra vez, ese gusto.
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